Una huerta conlleva una actividad que afecta positivamente a los alumnos independientemente de su edad, ya que puede adaptarse a distintos niveles según necesidades.
Por otra parte, realizar actividades de jardinería permite a los alumnos desarrollar habilidades sociales al estar trabajando en equipo constantemente. Además, el estar interactuando con los profesores y su familia les ayuda a crear una conexión especial.